Manejo eficiente del agua de riego
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Como el objetivo principal de regar es brindarle al cultivo el agua que necesita, pero sin desperdiciar este importante recurso, debemos evitar la aplicación del riego de una manera rutinaria. Para esto debemos evaluar si realmente el suelo está seco y si la planta en verdad está necesitando agua.
Para hacer esto, debemos acostumbrarnos a observar el cultivo antes de tomar la decisión de regar. Para ello, debemos fijarnos si el cultivo está marchito, o por lo menos, si las hojas se sienten más suaves. De igual forma debemos fijarnos si el suelo alrededor de la raíz está seco y entonces, después de hacer esto, tomamos la decisión de regar o esperar.
Si está dentro de lo posible, se pueden usar unos aparatos llamados tensiómetros, similares a los que vemos en la fotografía que sigue, los cuales se entierran en el suelo y nos indican si la planta puede extraer agua de él con facilidad, o si por el contrario, no queda agua disponible para la planta. El uso de tensiómetros es una forma segura de conocer la cantidad de agua que hay en el suelo y por lo tanto, de definir cuándo se debe regar.
Se ha repetido varias veces, que la selección del método de riego es de fundamental importancia para cumplir con las Buenas Prácticas Agrícolas. La selección de sistemas de riego que aumenten la eficiencia del uso del agua, tales como el riego por goteo que vemos en la fotografía siguiente o también la micro aspersión, favorecen la eficiencia del uso del agua, ya que se reduce el desperdicio, se pueden programar con mayor exactitud las cantidades de agua que requiere un cultivo, así como el momento del día en que lo necesita.
Además, el uso de sistemas como el riego por goteo o la micro aspersión, permiten llevar a cabo otras labores necesarias para el cultivo, como la aplicación de fertilizantes por medio de la fertirrigación y la aplicación de otros insumos, reduciendo así el riesgo de contacto de los trabajadores con este tipo de productos, y colocando estos insumos en el lugar y el momento preciso para el cultivo.
Antes de regar, debe comprobar si existe suficiente agua disponible en el suelo y también, si el cultivo realmente necesita el agua.
Revisemos ahora cuáles son las características del agua que debemos vigilar.