Características químicas y
microbiológicas del agua
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Siempre que sea posible, por ejemplo, cuando trabajamos bajo techo, debemos tratar de reutilizar el agua de riego que sobró y que no fue absorbida por el suelo o la planta. Esto, siempre y cuando el cultivo no sufra de alguna enfermedad en la raíz o si no representa un peligro de transmisión de enfermedades o plagas.
La calidad del agua que usemos en el riego también es una Buena Práctica Agrícola, ya que es un aspecto fundamental de considerar, porque si está contaminada como el agua de la siguiente fotografía, se puede dar el caso de que más bien contaminemos el producto con alguna sustancia dañina o con algún microbio que le produzca, al consumidor de nuestros productos, alguna enfermedad.
También se puede dar el caso de que el agua que usamos para el riego o para los atomizos, tenga una acidez, que lejos de ayudar a que se den buenos resultados, provoque que el insumo que se está aplicando se inactive y no funcione. Esto es muy importante, porque si el agua no tiene el valor de pH que requiere el agroquímico, al disolverlo lo puede inactivar, provocando que perdamos el dinero de la aplicación.
Por todo lo anterior, es necesario mandar al laboratorio una muestra de agua de la que usamos para regar, para atomizar, para lavar cajas o para lavar el producto que se produce en la finca. El joven que vemos en la siguiente fotografía, está tomando una muestra de agua del rio que usa para regar. Hay que tratar de que el recipiente en que tomamos la muestra de agua esté estéril y totalmente limpio. Al laboratorio debemos solicitarle que se le haga un análisis químico al agua, y también un análisis para comprobar la presencia o ausencia de microbios peligrosos, es decir un análisis microbiológico.
El análisis químico, ayuda a saber el valor del pH del agua, o sea, si el agua es muy ácida, o por el contrario, si más bien tiene un valor de pH muy alto, lo que quiere decir que es básica. Ambas situaciones pueden afectar principalmente, la acción de muchos plaguicidas cuando usamos esta agua para preparar los caldos de la mezcla y en estos casos, tendremos que agregarle a la mezcla algún producto que corrija el valor del pH.
El resultado del análisis microbiológico también es importantísimo, porque ayuda a comprobar si el agua está contaminada o no con algún microbio. Recordemos que esos microbios les pueden causar problemas de enfermedades a los empleados o a aquellos clientes que consuman el producto en que usamos esta agua de riego. En caso de que el agua esté contaminada, debemos buscar ayuda en un profesional capacitado, para que nos diga cómo hacemos para purificarla.
El resultado del análisis de agua, es una forma de comprobarle a nuestros clientes, que el agua que utilizamos en la producción está limpia y que no le perjudicará la salud, por lo tanto, esto ayudará a que adquieran confianza en lo saludable de nuestros productos.
Es necesario hacerle un análisis químico al agua que usamos en los procesos de producción, así como también un análisis de microorganismos, para estar seguros que no tiene ningún problema y que es agua limpia.
Usos de las diferentes Fuentes de Agua Disponibles
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Según sean las características de las diferentes fuentes de agua que se tengan a disposición, se debe tener claro cuál es el uso de cada una en los diferentes procesos de producción agrícola.
Dependiendo del origen del agua, así será el riesgo de que venga contaminada con alguna sustancia o con algún microorganismo, o que se contamine en cualquier momento. Esto determina el uso que se le puede dar a esa fuente de agua.
Recordemos que el agua es el principal medio para provocar una contaminación en el cultivo, en especial, como vemos en la siguiente fotografía, si el agua moja las hojas o frutos, ya que el agua se utiliza en la mayoría de las labores que se le realizan al cultivo y somos los humanos, los que la manipulamos en la mayoría de las veces.
En nuestras fincas entonces, es necesario decidir en qué vamos a usar cada uno de los tipos de agua que tenemos disponibles.
El agua de ríos y quebradas, aunque parezca limpia, tiene el inconveniente de que se puede contaminar en cualquier momento, porque no podemos controlar todo lo que pasa río arriba. Por lo tanto, este tipo de agua debemos usarla, solamente en riegos superficiales que no caigan sobre las plantas.
Por otra parte, el agua de pozo, siempre que esté bien aislada y protegida, la usaremos para regar con el sistema de riego por goteo o por aspersión, y el agua potable de la cañería, la podemos usar en el lavado de cajas de cosecha y en el empaque, así como también para el lavado de alimentos de consumo fresco. Además, el agua potable es la fuente de agua que se debe usar para consumo humano y para el lavado de manos, herramientas de cosecha y uniformes de trabajo.
Debemos evitar que aguas contaminadas entren en contacto con la parte comestible del cultivo, o que sea utilizada por las personas para sus necesidades cotidianas.
Cada tipo de agua se debe usar para distintos fines, según sea el riesgo de que esté contaminada y solo debemos usar agua potable para lavar los productos frescos de consumo directo.
Con este tema, usted ha finalizado la unidad relacionada con el manejo del agua de riego. Ahora usted está capacitado, para desarrollar una pequeña evaluación de los conocimientos adquiridos.